José Arlex Arias, Cartagena, agosto 8 de 2022

El informe Mortalidad Evitable en Colombia para 1998-2011 del Observatorio Nacional de Salud, ONS, fue publicado siendo Alejandro Gaviria Uribe ministro de Salud y Protección Social y Fernando Ruiz Gómez el viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios. El informe inicia: “El ONS es en la dirección del Instituto Nacional de Salud, INS, el encargado de la generación de evidencia para informar la toma de decisiones en salud, a partir de metodologías de análisis que integran la información disponible”. Y explica: “El ONS elaboró un listado actualizado de mortalidad evitable, apoyado en las clasificaciones aceptadas internacionalmente, teniendo en cuenta las condiciones de desarrollo tecnológico desarrollado y adoptado por el país”.

Los resultados en el periodo 1998-2011 reportaron en Colombia un total de 2.677.170 muertes, de las cuales 1.427.535 (53 %) correspondieron a causas clasificadas como evitables. La muerte evitable es aquella que, dados los conocimientos médicos y la tecnología, podría evitarse por el Sistema de Salud a través de prevención y/o tratamiento. Dice el estudio que “la mayor proporción de las muertes evitables se encontró en los grupos de enfermedades no transmisibles y lesiones… Por subgrupos, las enfermedades cardiovasculares fueron la principal causa de esas muertes, seguido por neoplasmas y lesiones intencionales. Las muertes evitables se concentraron en los menores de 5 años y en los grupos de 65 a 74. Para el trienio 2009-2011, la tasa de mortalidad evitable ajustada por edad y sexo por todas las causas es de 196 muertes por 100.000 habitantes. El análisis mostró que el riesgo de morir a nivel municipal respecto del nacional aumentó para agresiones con arma de fuego, parto prematuro, cáncer de tráquea, bronquios y pulmón… El 68 % de tales muertes ocurrieron durante, o antes, de la edad productiva. El costo total de la mortalidad evitable se estimó entre $142 y $266 billones de 2012. Los 10 entes territoriales con mayores costos por muerte evitable fueron: Antioquia, Valle del Cauca, Bogotá, Cundinamarca, Atlántico, Santander, Norte de Santander, Cauca, Tolima y Bolívar”.

El ONS concluyó que “más de la mitad de las muertes que ocurrieron en Colombia se debieron a causas de muerte evitables” y los colombianos sienten que este panorama no cambia, puesto que la filosofía del actual Régimen de Salud no es la de “salvar vidas”, sino la de la máxima ganancia de quienes se adueñaron del negocio de la Salud; por eso siguen recurrentes los “paseos de la muerte”, la “mamadera de gallo” con las autorizaciones, la demora en entrega de citas para medicina general, especializada y procedimientos quirúrgicos, la utilización de clínicas de garaje, y más mil etcéteras.

Las 1.427.535 víctimas inocentes, con seguridad fueron personas que no tuvieron los recursos económicos suficientes para costearse el derecho fundamental a la salud y por consiguiente a la vida, por lo que puede considerarse que en Colombia se está cometiendo un verdadero GENOCIDIO, como es la aniquilación sistemática y deliberada de un grupo social, por lo cual se hace imperiosa la actuación del próximo Gobierno, sin recurrir a la demagogia. El presupuesto destinado, entre el contributivo y el subsidiado, es suficiente para garantizar el derecho. ¡Los colombianos pagamos para que se garantice un derecho a la salud oportuno, universal y altamente científico!