Asamblea Departamental de Caldas, Manizales, 26 de febrero de 2004.
La Asamblea Departamental de Caldas, después de estudiar y analizar diversos documentos sobre la llamada Autopista del Café y la propuesta del gobierno nacional de instalar un peaje en la vía de la Siria con el propósito de “resolver el problema financiero del mejoramiento vial”, declara por unanimidad lo siguiente:
Que la Asamblea de Caldas desde hace más de un mes viene solicitando de manera insistente al Invias y al Ministerio del Transporte la entrega de todos los documentos que permitan aclarar el desbalance financiero, sin que ello haya sido posible.
Que en el año 1.998, después del conflicto desarrollado en Chinchiná, el gobierno nacional se comprometió a levantar las casetas de peaje instaladas en La Siria y La Trinidad.
Que posteriormente y como resultado de un proceso de negociación con las comunidades y con el Gobernador de Caldas de ese entonces, el gobierno aceptó que “no habría peaje sobre la vía de La Siria, ni durante la construcción del mejoramiento, ni durante el tiempo de duración de la concesión vial”.
Estos acuerdos quedaron consignados en los documentos y el contrato que permitió la continuación de las obras. Como lo señala el Comité de la Veeduría Ciudadana de la “Autopista” el segundo contrato contempla la eliminación del peaje de La Siria de la estructura financiera del proyecto.
Que con los nuevos estudios de tráfico y en las nuevas condiciones de desarrollo del proyecto, el Invias se comprometió a garantizar el pago por los vehículos que dejaran de transitar por las casetas de peaje de Río Barbas y Las Pavas, permitiendo de esa manera el cierre financiero y que para el mismo cierre la Alcaldía de Manizales a través de Infimanizales se comprometió a prestar veinte mil millones de pesos.
Que el consorcio, según los documentos de la contraloría, no cumplió con los aportes para la financiación del mejoramiento vial.
Que muchas de las especificaciones técnicas de las vías no se cumplen como lo prueban las intersecciones viales de la Uribe y Chinchiná.
Que a este proyecto se le colgaron obras en las áreas urbanas de Dosquebradas y Pereira que no tienen nada que ver con las comunicaciones intermunicipales e interdepartamentales, como lo son el variante sur en Pereira y la doble calzada de la avenida del ferrocarril en Dosquebradas.
Que la distribución de las estaciones de peaje es inequitativa y se recarga en nuestro departamento, aportando los caldenses el 69% de los costos de diseño, el 80% de la construcción y el 59% del mantenimiento, mientras que las obras realizadas en Caldas son solamente el 32% de las inversiones según el contrato de 1997. Es de anotar que esta situación se presenta porque en Caldas hay tres peajes mientras que en los Departamentos hermanos de Quindío y Risaralda solo hay uno.
Que tanto para Manizales como para Chinchiná y Palestina la existencia de un peaje en La Siria implica romper la necesaria comunicación y el intercambio económico y comercial de nuestros municipios. En ese sentido defendemos que a Manizales no se le aislé de su región natural.
Que hemos tomado atenta nota de las conclusiones de los documentos oficiales de la Contraloría General de la República, CGR y de la historia de los contratos de concesión del mejoramiento vial Manizales-Pereira-Armenia, quedando claro que la contraloría concluye que en el primer contrato “la propuesta presentada no es del todo conveniente ni favorable y no cumple con la totalidad de los requisitos técnicos, económicos y jurídicos contemplados en los pliegos de condiciones originales” y que, sobre el segundo contrato suscrito, la Contraloría señala que, “No existe claridad en el objeto del contrato”, “las cláusulas no son precisas en su alcance” lo que le permite al concesionario “resolver a su favor las discrepancias y diferencias que puedan presentarse”, “impide realizar un seguimiento preciso del desarrollo del proyecto”, el “concesionario no cumplió con los diferentes plazos para el cierre financiero”, “de manera parcial ha cumplido con el mantenimiento de las vías del proyecto”, y otra serie de hechos que permiten concluir el incumplimiento del concesionario de los términos pactados en los contratos y la largueza del Invias en la aplicación de los correctivos.
Ante esta realidad la Asamblea Departamental de Caldas al igual que el Comité Intergremial de Caldas, la Veeduría Ciudadana de la Autopista, la Central Unitaria de Trabajadores CUT, el Comité Antipeajes de Chinchiná, los Alcaldes de Chinchiná y Palestina, sus Concejos Municipales, el Comité de Cafeteros, varios de los Senadores y Representantes de Caldas, han expresado que el gobierno nacional debe respetar los compromisos adquiridos y desistir en su empeño de instalar caseta de peaje sobre la vía de la Siria y debe buscar con el consorcio y con el Invias otros mecanismos y soluciones que permitan la conclusión de las obras, tal y como lo desea esta Corporación y todos los Caldenses.
Finalmente, queremos resaltar la unidad que en defensa del interés regional han mostrado los Caldenses y colocar este hecho como ejemplo de que, alejados de posiciones sectarias y dogmáticas, podemos trabajar por el bienestar y defensa de nuestros ciudadanos.
Asamblea Departamental de Caldas
Manizales, 26 de febrero de 2004.