El Tiempo, Bogotá, agosto 12 de 2018
1. ¿Qué significa hacer la licitación teniendo como norma la Banca Multilateral?
ASM: “Circunscribir la licitación del metro a las normas internacionales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) es básicamente perder rigor, porque, por ejemplo, el BID puede entregar la licitación a una lista que ellos mismos seleccionan de oferentes. Además el BID permite abrir la licitación sin que estén los estudios completos”.
2. ¿Están o no los estudios y diseños de factibilidad y finales?
ASM: “Los estudios no están completos. Por ejemplo, la interventoría ha dicho que se requieren 27 estudios y la verdad es que solo se sabe que hay un avance o están completos tres de ellos. Pero esos tres no parece que fueran los más importantes. Este es un proyecto que tiene el 3 o el 5 por ciento de avance y así no se puede abrir una licitación internacional”.
3. Este es el proceso más avanzado, entonces ¿por qué no apoyarlo y sí buscar echarlo para atrás?
ASM: “No lo quiero echar para atrás, pero lo que sí quiero es que se haga bien. Es verdad lo que dice usted, tanto que hemos esperado y sí ya existe este avance, pues hagámoslo bien, porque la peor paradoja es que a pesar de que hay un adelanto y se hace mal, se pierde una garantía y un control por el más grande proyecto de la ingeniería e infraestructura de Colombia”.
4. ¿La troncales sí alimentan o no la primera línea del metro?
ASM: “La bandera de Enrique Peñalosa ha sido buses rojos para los próximos 100 años por todas partes y el metro aparece como un elemento complementario en el sistema de transporte. El gran eje del sistema integrado del trasporte de Bogotá debe ser el metro, y Peñalosa dice que deben ser los buses rojos y esa es una discusión casi que antagónica con el alcalde”.